Preocupación y protección

Nuestra principal preocupación: la familia

En el Mes de la Familia Naval, el Servicio de Bienestar Social renueva su compromiso de apoyar al personal y su grupo familiar con el propósito claro de mejorar su calidad de vida.

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Para la Armada mayo es un mes especial, no sólo porque se enaltecen las Glorias Navales, sino porque también es tiempo de honrar a la Familia Naval. Para quienes somos parte de esta Institución, la familia constituye un puntal fundamental, ya que es la que acompaña y apoya incondicionalmente al servidor naval, sea cual sea el lugar geográfico donde se encuentre y la función que le corresponde desempeñar durante el tiempo en que deba cumplir la desafiante travesía que significa la carrera naval.

En los últimos años, la sociedad chilena ha experimentado profundas transformaciones culturales y sociales. Todos escenarios y desafíos para la Institución que recaen en su capital humano y que requieren un esfuerzo adicional en lo estructural, organizacional y normativo para corresponder a esas exigencias adaptativas.

De ahí entonces que la preocupación esté centrada en contribuir a mejorar las condiciones del entorno personal, familiar y laboral de cada uno de los hombres y mujeres que pertenecen a sus filas y que los lleven, finalmente, a cumplir con compromiso y dedicación sus obligaciones en beneficio de la misión de la Armada.

Vivienda

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Considerando que la vivienda fiscal constituye un beneficio significativo para la familia naval, la Institución está abocada a concretar un extenso programa de construcción de viviendas fiscales, que recoge las necesidades de nuestra Gente de Mar en zonas como Puerto Montt, Talcahuano, Arica, Antofagasta y Valparaíso, dando así solución al déficit histórico y a la modernización del parque habitacional existente. En forma paralela, el Servicio de Bienestar Social ha establecido un plan de mantenimiento del parque habitacional que busca, para los próximos años, mejorar sus condiciones de habitabilidad para así otorgar una infraestructura segura y de buena calidad, acorde a las normas y estándares actuales de construcción.

De la misma manera, la compra de la vivienda propia es una decisión transcendente a nivel familiar. A la luz del éxito alcanzado con el nuevo modelo de gestión inmobiliaria institucional, los proyectos y convenios inmobiliarios han permitido diversificar la oferta para que Oficiales, Personal de Gente de Mar y Empleados Civiles, puedan acceder a la anhelada casa propia en la medida de sus posibilidades económicas, generando en los últimos 4 años cerca de 900 soluciones habitacionales para el personal naval.

Educación

Otro elemento cooperador en la asistencia integral a la Familia Naval lo constituye la educación inicial que se brinda a los hijos menores de 2 años de edad de los servidores navales, a través de las salas cuna institucionales, dando cumplimiento con el Beneficio Legal Maternal. Esta etapa, que constituye el primer nivel del ciclo educativo, luego continúa articuladamente en los jardines infantiles y colegios navales, los que en una gestión educacional integrada proyectan un perfil de niño y joven competente para integrarse a la sociedad.

Prevención

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La educación en la prevención es un elemento de vital importancia frente a problemáticas sociales que traspasan el ámbito privado, porque existe una responsabilidad que involucra a la Institución en la búsqueda de soluciones.

En tal sentido, mejorar los factores de protección y revertir o reducir los factores de riesgo para evitar la aparición de problemáticas sociales es una misión que se ha trazado el Servicio de Bienestar Social.

Así, el accionar se ha enfocado en la ejecución de programas que les entregan a los servidores navales y sus familias las herramientas para prevenir y enfrentar situaciones de riesgo en temas relacionados con: violencia intrafamiliar, embarazo y maternidad, prevención de drogas y alcohol, relación de pareja y paternidad responsable, empatía y comunicación asertiva, orientación para los buenos tratos en la infancia, entre otros.

Sabemos que el camino es largo y en la medida que se experimentan cambios en la sociedad se incrementan los desafíos por seguir optimizando los apoyos de vida, con el objetivo de poder brindar mejores coberturas, mejores servicios y, en definitiva, una mejor calidad de vida.

El desafío que viene por la proa es claro: seguir el camino interminable, pero a la vez motivante, de mejorar las prestaciones de bienestar de acuerdo a las demandas de calidad y variedad que requiera nuestra querida familia naval.

Para su cumplimiento, existe un gran grupo humano de hombres y mujeres con vocación de servicio, comprometidos con la Institución y que se esmeran día a día en entregar, con oportunidad y alegría, lo mejor de sí para poner a disposición de toda la familia naval un bien intangible y subjetivo como lo es el Bienestar.