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PSG “Micalvi”
25 años al servicio del país
El Patrullero de Servicio General (PSG) “Micalvi” fue construido en 1992 por los Astilleros y Maestranzas de la Armada (ASMAR), en la ciudad de Talcahuano, y fue el primero de los seis buques de la Armada de clase “Taitao” en entrar en servicio.
El Patrullero de Servicio General (PSG) "Micalvi" entró en servicio el 3 de marzo de 1993, siendo destinado a la Tercera Zona Naval, con puerto base en Puerto Williams, donde sirvió por 11 años como buque de apoyo logístico del Comando de Torpederas. En el 2003, y por resolución del Alto Mando Naval, fue redestinado al entonces Distrito Naval Chiloé, actual Quinta Zona Naval, con puerto base en Puerto Montt, donde arribó en febrero del año siguiente.
Desde su arribo a esa ciudad, el buque ha cumplido diferentes funciones del ámbito marítimo, las que van desde fiscalización pesquera, mantenimiento a la señalización marítima y reaprovisionamiento y apoyo a las zonas aisladas. Sumado a lo anterior, anualmente se realizan al menos dos comisiones hidrográficas en apoyo del Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada. "Este año efectuamos una en marzo en el área de la bahía de Maullín y en septiembre estaremos en el área de Mejillones, en el norte del país", comenta el Comandante de la Unidad, Capitán de Corbeta Mario Valenzuela. Asimismo agrega que: "Cada cuatro años, el buque asume las tareas de buque médico dental en reemplazo del PMD "Cirujano Videla" mientras éste se encuentra en período de reparaciones.
De este modo, uno de los objetivos planteados para este año, fue cumplir con las rondas médicas en apoyo a los Servicios de Salud de Chiloé y Reloncaví, tarea que finalizó el pasado 20 de julio, cumpliendo la totalidad de las rondas establecidas".
Con respecto a los 25 años de servicio del buque en la Institución, el Capitán Valenzuela destaca el espíritu de la dotación del "Micalvi", el cual ha sido reconocido por la población y por el personal del servicio de salud de Chiloé durante las rondas médicas. "Al asumir el mando me di cuenta que ser "Micalvino" era algo especial. Esto lo fui comprobando con el transcurso del año. A pesar del alto grado de actividad y ser una dotación joven, todos se han comprometido con las diferentes tareas encomendadas y lo más rescatable, es que han mantenido la alegría y el espíritu de cuerpo para hacer las cosas", indica el Capitán Valenzuela.
El Cabo 2º "Calamar"
Luego de ser rescatado en 2008 tras la erupción del volcán Chaitén cuando tan sólo era un cachorro, "Calamar" pasó a formar parte del buque, ostentando en la actualidad el grado de Cabo 2º.
"Si bien los buques no están hechos para los perros, Calamar en sus 9 años a bordo se ha adaptado a la vida de un marino. La dotación, en especial los que llevan poco tiempo en el buque y del personal civil que trabajó con nosotros, le tienen un cariño especial. Esto se ve reflejado estando fuera de puerto base y cuando está falto al zarpe, en donde se arma un dispositivo para traerlo a bordo. Sin duda, este ha sido el año de Calamar, que después de varios reportajes dando a conocer su historia, en algunas localidades lo han reconocido y piden permiso para sacarse fotos con él", cuenta el Capitán Valenzuela.
Subteniente Carlos Torres
"Este es mi primer año a bordo y para mí ha sido una experiencia muy gratificadora, donde he podido adquirir mucha experiencia en navegación y conocer lo que es verdaderamente el trabajo en equipo. También ha significado un desafío profesional al tener que superarme en nuevas áreas como las telecomunicaciones y liderar un grupo de hombres profesionales y experimentados".
Sargento 2º Maniobras
Máximo López "Pertenecer a la dotación de este buque ha sido un desafío, ya que por primera vez tengo el cargo de ser el Contramaestre de una unidad. Para mí es sumamente importante llevar bien este desafío, para que pueda cumplir bien con mis funciones y apoyar en lo que más pueda al mando y a las distintas actividades que realiza el buque".
Cabo 1° Álex Miranda
"En lo profesional me ha fortalecido en mi área, teniendo a cargo toda la maquinaria de propulsión de la Unidad, y al mismo tiempo, desarrollando mis capacidades de liderazgo. Respecto a la camaradería me he desempeñado como jefe de cámara de cabos y marineros por dos años consecutivos, profundizando la consigna del comandante de "buque feliz" y el espíritu de unión de la dotación en las navegaciones largas".