Decir que nuestro país se ha transformado en un verdadero Laboratorio Natural para quienes estudian este tipo de fenómenos, es una realidad que no sólo ha permitido volcar la mirada interna de científicos y profesionales en esta materia, sino que además, ha llevado a importantes organismos internacionales a dirigir sus esfuerzos para probar, desde estas latitudes, las últimas tecnologías asociadas a la detección temprana y monitoreo de tsunamis.

De esta forma y tras la firma del convenio entre el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada y la National Oceanic and Atmospheric Administration, realizada en el mes de julio del año 2015, en septiembre de ese mismo año se realizó el fondeo de dos prototipos del Sistema DART 4G, a 77 y 113 millas náuticas al oeste de las costas de Mejillones y Constitución, respectivamente, con lo cual se inició la cobertura de la zona tsunamigénica centro – sur del país. Si bien la instalación de estos instrumentos estaba programada con antelación al terremoto y tsunami que afectó la Región de Coquimbo durante septiembre del 2015, esta situación no sólo confirmó una vez más la condición sísmica que posee el país, sino que además, evidenció la necesidad permanente que existe de ir optimizando nuestro Sistema Nacional de Alarma de Maremotos (SNAM), con el objetivo de enfrentar de manera oportuna los futuros eventos, que sin lugar a dudas, seguirán presentándose frente a las costas chilenas.

Entendiendo la importancia que existe de ir conociendo cada vez más este tipo de fenómenos, tanto en Chile como en el extranjero, el 7 de diciembre recién pasado, se realizó el fondeo de una 3ª Boya DART 4G a 120 millas náuticas al NW de la ciudad de Valparaíso, cercano al sector de Pichidangui, y que pasó a ser la 5ª desplegada frente a las Costas de Chile, actividad que fue realizada con el Buque Oceanográfico de la Armada de Chile AGS "Cabo de Hornos" y ejecutada por profesionales del SHOA.

Con los cinco Sistemas DART desplegados y operando en forma permanente, Chile se convierte en el país con una de las redes más importantes de monitoreo y pronóstico a nivel sudamericano; condición que, sumada a la implementación de nuevas aplicaciones como el Sistema Integrado de Predicción y Alarma de Tsunamis (SIPAT) y la coordinación y establecimiento de protocolos entre los organismos involucrados en la gestión de la emergencia, logra situar al SNAM como un referente a nivel internacional; producto de la cooperación y continuo apoyo desde diversos ámbitos académicos, científicos y tecnológicos.

Por su condición geográfica, Chile seguirá enfrentando eventos sísmicos que pueden generar tsunamis. Esta realidad obliga, no sólo a las Instituciones, sino que también a la ciudadanía, a estar siempre preparados para enfrentarlos de la mejor manera posible. El SHOA, a través del SNAM, seguirá trabajando para dar una respuesta oportuna y efectiva a la comunidad ante estas emergencias, reafirmando su compromiso con la seguridad de las personas a nivel nacional e internacional.