Conductores Navales
La Marina en movimiento
Día a día, los especialistas conducen una gran cantidad de vehículos que posibilita que la Institución lleve a cabo su labor logística, militar y administrativa en tierra.
Sobre sus manos está la responsabilidad de conducción segura de personas, desde el Comandante en Jefe de la Armada hasta el último Grumete de la Isla Quiriquina, pasando por el Alto Mando Naval, cargas peligrosas, faenas de munición, transportes de tropas, autoridades extranjeras, personal y material.
Al igual que muchas especialidades de la Armada, la del conductor naval es una carrera bastante sacrificada, de largas jornadas laborales y de mucho tiempo alejados de sus familias, pero que al mismo tiempo se ve recompensado con la posibilidad de recorrer Chile por completo, de norte a sur.
"En esta querida especialidad he podido desenvolverme en distintas áreas que no imaginaba. En ese sentido, lo interesante de esta especialidad es que ningún día es igual a otro. Ayer aprendía todo lo referente al trabajo del área del Litoral, y hoy estoy a bordo de la Escuadra Nacional, conociendo la esencia misma y pura de la marina; y mañana tal vez, en algún otro lugar que me depare el destino. La posibilidad de conocer, aprender y adquirir nuevos conocimientos es algo increíble", comentó el Sargento 2º Mauricio Fuentes.
El Marinero 1º Ronald Labraña ingresó el año pasado a cursar la especialidad y desde a principios de este año se encuentra transbordado al Centro de Transportes de Valparaíso (CENTRAVALP). Su gusto por la Armada y por conducir lo llevaron a elegir esta especialidad. "La versatilidad de ser conductor naval me llamó la atención. No sólo conducimos cualquier tipo de vehículo sino también hacemos el trabajo administrativo que conlleva la especialidad, nos preocupamos de la mantención de los vehículos y que estén impecables para realizar las labores que se nos soliciten", indicó.
Si bien el mundo automotriz es netamente de hombres, la llegada de la mujer ha traído nuevos aires a la especialidad. En la actualidad hay dos mujeres especialistas; una de ellas es la Marinero 1º Paulina Oyanadel, quien llegó este año transbordada a CENTRAVALP.
Proveniente de una familia de choferes; su papá y hermano conducen camiones, la Marinero 1º comenta que siempre le gustó conducir y también la Armada como institución. "Es una especialidad muy bonita, donde uno tiene la posibilidad de realizar distintas labores cada día. Por ejemplo, un día puedo estar haciendo una faena de víveres; y el otro ir en comisión a buscar a alguna persona al aeropuerto, y eso lo hace muy dinámico y entretenido".
El Sargento 1º Patricio Naranjo, es el encargado de vehículos fiscales del área Valparaíso. Es aquí donde se ve el papeleo necesario (permiso de circulación, inscripción, patentes, seguros, etc.) para que los vehículos estén en las condiciones óptimas para su normal funcionamiento. "El trabajo administrativo que se hace es bastante importante. El rodaje de la Marina depende exclusivamente del área administrativa de CENTRAVALP", cuenta.
Con 25 años de Marina, el Sargento Naranjo estuvo 11 años destinado a la Dirección de Ingeniería de Sistemas Navales (DIRISNAV), donde tuvo la posibilidad de capacitarse en el área de SALINO. Además, "fue la primera repartición donde me pude desarrollar como encargado de movilización, que eso me ha incentivado a seguir avanzando en el desarrollo de mi especialidad", comenta.
Himno del Conductor Naval
Con fecha 15 de abril de 2016, en el Boletín de la Armada se aprobó el himno de los Conductores Navales, el cual fue producido por el Sargento 1º Chofer Naval Manuel Hormazábal y el Sargento 1º IM Músico Patricio Maldonado.
Conductores Navales de Chile
en la ruta a lo largo del país viajando
a un destino dispuesto
que la Armada me ha de decir.
Conducir largas horas sin descanso
a la gloria muy pronto he de llegar
y en el cielo iluminado el camino
está Dios, nuestros mártires y Prat.
Coro
En desierto, montañas y en los valles
sea en la noche o cuando brille el sol
yo conduzco por mi país entero
haciendo grande a mi Institución.
Rumbo a un puerto vamos presurosos
nuestra carga va sin novedad
el repuesto está entregado a tiempo
y un buque muy pronto zarpará.
y el buen Dios
me guía desde el cielo
para siempre llegar sin novedad
se ha entregado
una carga a tiempo
y estoy listo nuevamente a zarpar.