El primer sentimiento que viene a mi mente al haber sido el Condestable Mayor de la Armada durante este año, es la gratitud a mi mando y a la Institución por la confianza depositada en este Suboficial Mayor; por permitirme llegar a las dotaciones a través de todas mis visitas a lo largo de país, con el objetivo de crear la conciencia de que existe una voluntad de nuestro Comandante en Jefe de la Armada de tener un mando justo y cercano, y que el grado de Suboficial Mayor se puede alcanzar si uno se lo propone y hace bien las cosas y entrega su mejor esfuerzo a la Institución.

Siempre lo he dicho: "Disfrutar el grado, es hacer gestión por nuestra gente". El haber llegado a este grado es un verdadero privilegio, pero alcanzar la distinción de ser el Condestable Mayor de la Armada es el honor más grande que puede alcanzar el personal de Gente de Mar.
Es un sueño cumplido de llegar a la meta con la satisfacción del deber cumplido, simbolizando la culminación exitosa de una vasta carrera con muchas mareas buenas y malas.

He tomado este desafío con mucha responsabilidad y compromiso. No quisiera de dejar de mencionar el agradecimiento a todos los Suboficiales Mayores, quienes fueron mis asesores en mi gestión y que sin su apoyo, no hubiese podido cumplir cabalmente mi gestión encomendada.

El apoyo de mi familia ha sido fundamental, ya que siempre ha sido el pilar que me ha ayudado a alcanzar esta meta. Ellos siempre me han brindado todo el aliento en los momentos más difíciles de mi carrera y me han acompañado en todo momento y ellos saben perfectamente cuando algo me preocupa o cuando estoy alegre por algún logro obtenido. Ellos saben que todos los días son diferentes para mí y que trato de cumplir de la mejor forma posible. A ellos les dedico el triunfo alcanzado y les doy las gracias por ser mi familia.

Finalmente, a las nuevas generaciones, sólo quiero expresarles que no existe una fórmula para alcanzar el grado de Suboficial Mayor, pero les puedo asegurar que arraigando en sus vidas los valores y principios recibidos en la casa y la Marina, siendo leales, disciplinados y por sobre todo siempre querer ser el mejor en todo lo que se emprende, se les hará mucho más fácil llegar a lucir el galón ancho en su uniforme.

ÁLEX CARRASCO BERNAL
Suboficial Mayor
Condestable Mayor de la Armada