Al observar a un tío paterno me interesé por servir en las Fuerzas Armadas, pero fue un amigo y compañero del Liceo Industrial de Concepción, quien me comentó de la Armada, y a los 16 años decidí canalizar mi vocación en la Escuela Grumetes "Alejandro Navarrete Cisterna".

Cuando le comuniqué mi decisión a mis padres se pusieron felices. Provengo de un hogar humilde del sector Costanera de Concepción, pero muy feliz. Mis padres siempre nos inculcaron la educación, la honestidad, el sacrificio, la felicidad y ser buenas personas para conseguir las metas propuestas. Esos valores fueron potenciados en la Institución y hoy puedo decir que soy una persona muy realizada y estoy muy contento con lo que he hecho en mi vida personal, familiar y laboral. La Marina es una hermosa institución que ofrece muchas oportunidades.

La mayor parte de mi carrera profesional la desarrollé en diferentes buques, como misileras, Unidades de la Escuadra, el Buque Escuela "Esmeralda" y barcazas, completando 20 años de embarco, los que me han permitido adquirir experiencias que han aportado a mi vida.

La notificación de mi nuevo cargo la recibí siendo el Condestable de la Inspectoría de Ingeniería de Sistemas Navales Talcahuano (Idistalc), una de las pocas reparticiones en las que presté servicio, y donde se unieron dos cosas que me gustan, trabajar con Unidades y con las dotaciones que prestan servicio en ellas.

En diciembre de 2015 junto a mi esposa, Ligia Cornejo, dejé mi natal Concepción y mi "querida" Segunda Zona Naval, con el orgullo de haber sido nombrado por el Alto Mando Naval, como el nuevo Condestable Mayor de la Armada. Una designación muy importante y de mucha responsabilidad, el anhelo de cualquier Suboficial Mayor, y la que asumo con alegría y humildad, en la que espero realizar una bonita gestión.

Asimismo, el haber sido designado para este cargo siendo parte de las filas de la Segunda Zona Naval tiene mucha importancia para mí, ya que es una Zona a la que yo aprecio mucho, y esta designación también es un incentivo para que el personal más joven se dé cuenta que el Condestable Mayor de la Armada puede salir de cualquier repartición o Zona Naval, sólo deben hacer las cosas bien, trabajar duro y con una actitud de felicidad.

Con este cargo, mi propósito es llegar de proa a popa y desde quilla hasta la perilla de las Unidades y Reparticiones con el mensaje del Almirante, que es tener una Marina cercana entre el mando y el personal. Mi trabajo estará orientado a estar muy cerca del personal de Gente de Mar para conocer sus inquietudes y así brindar un apoyo rápido y certero cuando sea requerido por nuestro personal y su mando. Proyecto al que quiero invitar a que se sumen los Suboficiales Mayores, Suboficiales y Sargentos, que son los mandos medios, y sean ellos mi red de apoyo en esta tarea encomendada, manteniendo una preocupación permanente del quehacer de los cabos y marineros.

Suboficial Mayor Mario Rojas

Condestable Mayor de la Armada