En el mes recién pasado, Chile fue reelecto como miembro del Consejo Consultivo de la Organización Marítima Internacional (OMI), dejando en claro, una vez más, la preponderancia que nuestro país ha alcanzado en el concierto internacional en el ámbito marítimo. La mayor votación histórica obtenida en esta instancia, sólo refrenda el irrestricto compromiso que tiene la Marina ante la OMI, lo que se suma a la intensa labor de colaboración que el  Estado de Chile ha realizado, brindando apoyo técnico a países de Centroamérica, en la ejecución de los estudios de factibilidad, para implementar los Centros de Búsqueda y Rescate Marítimo (MRCC).

Debemos sentirnos orgullosos de ser referentes en este ámbito, condición que como país eminentemente marítimo, nos impone varios desafíos; ello porque no sólo Chile nos mira con atención, en nuestra tarea como Autoridad Marítima, sino que la Comunidad Marítima Internacional está consciente y convencida, que nuestra Institución es seria, comprometida y con las capacidades suficientes para lograr una adecuada difusión y operativización de las políticas que promueve la OMI.

Por otro lado, en diciembre la Institución graduó una nueva generación de Oficiales y Gente de Mar, en solemnes ceremonias realizadas en la Escuela Naval, la Escuela de Grumetes y la Academia Politécnica Naval. Este nuevo grupo de profesionales, tiene el enorme desafío de incorporarse a las dotaciones de una Marina potente, preparada y altamente entrenada, que se debe a sus compatriotas y al país en general. No podemos olvidar que, con Oficiales y Gente de Mar en un alto nivel de preparación y formación, nuestros conciudadanos pueden estar confiados que la seguridad de las fronteras marítimas, la salvaguarda de la vida humana en el mar, la protección contra la contaminación del ambiente acuático y todas las silentes tareas que realiza la Marina, están en manos de profesionales competentes, comprometidos y leales.

A principios del mes de enero, se inauguró la Estación Polar Científica Conjunta en el glaciar “Unión”, luego de una ardua tarea de nuestros marinos y personal del Ejército, Fuerza Aérea y del Instituto Antártico Chileno (INACH). Esta nueva base representa un importante paso en la Política Antártica Chilena, demostrando así el profundo compromiso y la significativa presencia que tenemos en el Continente Blanco. Somos parte del Tratado Antártico desde su firma, en 1959, y hemos sido, somos y seguiremos siendo actores preponderantes en las actividades que ocurren en el sur del mundo. Con esta nueva base, nuestra presencia en la Antártica queda más que refrendada y quiero reconocer, además, al personal de nuestra Institución que se encuentra ya instalado en ésta; su profesionalismo y espíritu de sacrificio son encomiables. Desde Chile Continental, les enviamos nuestro más afectuoso saludo.

En este período estival, descansen y recarguen baterías para los desafíos que se nos presentarán este 2014, manteniéndonos, como siempre: “full alertas”.