Derrotero del Almirante - Mayo de 2014

El Mes del Mar en nuestro país ya es una tradición que está profundamente arraigada en el alma nacional.

A lo largo de los años, nuestros compatriotas han mirado cada vez con más frecuencia y certeza hacia el mar, comprendiendo, de mejor forma, las potencialidades y oportunidades que éste puede ofrecer en beneficio del país.

Para los marinos, el Mes del Mar no sólo tiene una importancia desde el punto de vista de la conciencia marítima y todo lo que el mar puede entregar a Chile, sino que también nos recuerda, año a año, la gesta heroica más importante de nuestra historia, donde un Comandante resuelto, audaz y valiente, dio la vida por su Patria en una lucha desigual junto a una dotación de bravos que no trepidaron, ni por un momento, en llegar al sacrificio sublime en honor a su bandera.

Nuestra historia, escrita con la sangre de los héroes de la gesta inmortal de Iquique, nos impulsa a ser cada día mejores, a corresponder con profesionalismo y entrega a los chilenos que confían en nosotros y que ven en los marinos de Chile, un pilar en el cual se sostienen los cimientos más profundos de nuestra nacionalidad y de nuestra alma.

En otro orden de cosas, a principios de abril se efectuó el lanzamiento y bautizo del OPV “Marinero Fuentealba” en los astilleros de ASMAR en Talcahuano. Esta nueva Unidad, la tercera en su tipo, marca diferentes hitos para la Armada. El constatar el estado operativo de nuestro astillero, fuertemente azotado por el desastre de 2010, pero que ha sabido salir adelante con el esfuerzo de todos sus trabajadores y directivos, nos llena de satisfacción. Ya a los pocos meses del terremoto, la planta realizaba trabajos de maestranza, lo cual ponía de manifiesto la voluntad de su gente en superar las dificultades. Cabe consignar también, que este nuevo OPV tiene mejoras respecto a sus predecesores, el “Piloto Pardo” y el “Comandante Toro”, entre las que se puede destacar el reforzamiento del casco para navegar en clima frío -considerando que será destinado a la Tercera Zona Naval- y la mejora en su armamento principal, lo cual demuestra el proceso de mejora continua que tiene ASMAR en el desarrollo de sus proyectos.

A quienes allí laboran, les agradezco, a nombre de la Marina, su incansable labor y profesionalismo en el proceso constructivo de este nuevo buque, el que pronto podremos incorporar a la Institución en forma oficial.

En el último tiempo, dos lamentables emergencias azotaron nuestro país: el terremoto en el Norte Grande y el gran incendio en un vasto sector de los cerros de Valparaíso. En ambos casos, la Institución tuvo preponderantes actuaciones y creo oportuno destacarlas. En la emergencia en el norte de Chile, la Armada, con sus hombres y mujeres, estuvo desde el primer momento lista a reaccionar. El SHOA desplegó todo su profesionalismo y a los pocos minutos se daba la alerta de tsunami a las autoridades, tal como el exigente protocolo lo reclama. Las dotaciones en la Cuarta Zona Naval reaccionaron en gran forma y prontamente se encontraban en situación de apoyar a la ciudadanía, ante los eventuales requerimientos de la autoridad.

Por otro lado, en medio de la emergencia que sacudió a nuestro querido Valparaíso, quiero darle una palabra de aliento a los servidores y Familia Naval afectados y expresar el más férreo compromiso de la Institución, de apoyar en todo lo necesario para superar, de la manera más pronta posible, sus urgencias y necesidades. A quienes estuvieron trabajando en levantar a nuestro Puerto Principal, quiero expresarles mi reconocimiento y admiración por la anónima labor que realizaron en apoyo a sus conciudadanos. La meta es ambiciosa, el trabajo será duro, pero no tengo ninguna duda que con la ayuda de todos, cumpliremos el objetivo de volver a la normalidad la ciudad puerto, a la brevedad posible.

Debo decir que me siento particularmente orgulloso de todos los que están prestando desinteresada ayuda, en el Norte y en la Zona Central, porque demostraron que, en situaciones donde el país lo requiere, los marinos de Chile están listos para actuar en apoyo de sus compatriotas.

Finalmente, quiero desear a todos un buen Mes del Mar, esperando que nuestros compatriotas sigan conociendo más nuestro mar y confiando en sus marinos. Sean ustedes dignos representantes del uniforme que vistieron los héroes de Iquique y sigan siendo esa mano que ayuda, desde el mar, en los momentos de más necesidad a los chilenos.