Revista Vigía, para quienes somos parte de la Armada de Chile, representa una parte importante de nuestra propia historia. Es así como este año, nuestra revista cumple 30 años de edición ininterrumpida, donde mes a mes nos entrega interesantes artículos de interés y la actualidad de las dotaciones de la Marina, desplegadas a lo largo del el país y en el extranjero. Creo justo mencionar que debemos sentirnos orgullosos de nuestra revista. En ella, se han escrito largos pasajes de nuestra vida institucional reciente, guardando un fiel reflejo de las numerosas actividades que se han realizado en las últimas tres décadas.

Desde 1985, cuando el entonces Comandante en Jefe de la Armada, Almirante José Toribio Merino recibió el primer ejemplar de Vigía, mes a mes, el medio de comunicación interna más importante que tenemos ha continuado con el mandato que se le entregó, en el sentido de establecer una vía de comunicación efectiva con las dotaciones de la Marina, entregando contenidos amenos y de interés para todos los marinos y sus familias. A lo largo del tiempo, Vigía he evolucionado en su forma, de acuerdo a las nuevas tecnologías de diagramación e impresión, pero ha mantenido incólume su fondo, que sean las dotaciones de la Armada sus protagonistas. Quiero expresar al equipo editorial de Vigía, mis más sinceras felicitaciones por los 30 años nuestra revista.

Durante este mes, celebramos además, el aniversario de dos especialidades señeras de la Institución, Abastecimiento e Infantería de Marina, cuyos especialistas han marcado el devenir de la Institución por casi 200 años. Quienes ostentan la piocha que los distingue como Infantes de Marina, tienen una historia plagada de éxitos y de valentía, con acciones cargadas de heroísmo y con una impronta que los Soldados del Mar han sabido mantener. En los tiempos actuales, además de la reconocida capacidad combativa, la Infantería de Marina se ha distinguido por su profunda entrega y sacrificio al servicio de nuestros compatriotas, cada vez que la naturaleza ha golpeado alguna zona de nuestro país, desplegándose en poco tiempo, para concurrir en tareas de resguardo del orden público y auxilio de las personas que lo han requerido. Estas actividades no sólo hablan del profesionalismo del personal IM, sino que también de una vocación de servicio a toda prueba.

Por otro lado, los especialistas en Abastecimiento celebran 197 años de existencia, en los cuales han servido a la Marina con gran profesionalismo en la difícil labor de administrar los recursos institucionales de manera eficiente y apegada a la legislación. Sus desvelos constantes por cumplir con esta compleja y fundamental tarea, enaltecen una especialidad que prácticamente nació con la Marina y que, a lo largo de los años, ha sabido construir un prestigio que pocos tienen y que muchos quisieran.

A nuestros Infantes de Marina y Abastecimientos, muchas felicidades por este nuevo aniversario y los insto a seguir por la senda del profesionalismo que durante casi dos siglos, han trazado en su andar.