Especialidad de Justicia de la Armada

Asesoría integral en materia Jurídica

A través de sus Oficiales y Empleados Civiles abogados, desarrolla sus labores en diversas áreas del quehacer institucional, a lo largo de todo Chile, en especial, orientando jurídica y legalmente a los Mandos Institucionales y a los Jueces Navales en la toma de decisiones y fallos de su competencia.

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Contraalmirante JT Cristián Araya, Auditor General de la Armada.

El 25 de abril de 1839 se creó el Servicio de Justicia de la Armada. En sus inicios, el primer Auditor General o abogado encargado de la asesoría jurídica de la Institución aconsejaba, directamente, al Comandante en Jefe en los asuntos más importantes. Hoy, con una dotación compuesta por 38 Oficiales de Justicia y 35 Empleados Civiles abogados, desarrolla sus labores en diversas áreas del quehacer institucional, orientando prácticamente a todos los Mandos de la Marina, a lo largo del territorio chileno.

El Auditor General de la Armada, Contraalmirante JT Cristián Araya, explica que la función principal de los Oficiales de Justicia y abogados, es procurar orientar al Mando para que todas las decisiones que se adopten se encuentren dentro del ámbito legal, dentro de la Constitución, de la Ley y de los Reglamentos: “no hay ninguna actividad de la Marina que no cuente con la asesoría jurídica de un Auditor, quienes están organizados en forma institucional, a través del Servicio de Justicia Naval”.

FUNCIONES EN LA ARMADA

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Capitán de Navío JT Rodrigo Ramírez.

El Contraalmirante JT Araya destaca el rol que un gran número de los Oficiales cumple dentro de la Justicia Militar, ya sea como auditores de zona, como fiscales navales, como secretarios de las fiscalías navales y también como relatores. “El Auditor General y el Director General del Personal de la Armada, junto a dos ministros civiles de la Corte de Apelaciones de Valparaíso, conforman la Corte Marcial de la Armada”, dice.

El Capitán de Navío JT Rodrigo Ramírez, Jefe del Departamento Jurídico de la Dirección General del Territorio Marítimo y de Marina Mercante, recalca la labor de su departamento, donde destaca el tener a cargo el Registro de Naves y Artefactos Navales Mayores, en el cual se inscriben las naves y artefactos navales mayores, entre otros antecedentes, con el objetivo de dar cumplimiento a lo dispuesto en la Ley de Navegación y en el respectivo Reglamento.

En relación a su experiencia, comenta que “la diversidad de las materias que deben ser analizadas en este Departamento hacen que el trabajo siempre genere nuevos desafíos profesionales”.

Por su parte, la Capitán de Corbeta JT Marcela Vergara, quien se desempeña en el Comando de Operaciones Navales, asegura que su labor tiene dos aristas: “una que tiene que ver con la parte operativa, es decir, que lo que se planifique lo podamos llevar a cabo; y otra que es la asesoría directa al Comandante de Operaciones Navales, en cuanto a la parte disciplinaria y judicial”.

EL SELLO DE LA ESPECIALIDAD

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Capitán de Corbeta JT Marcela Vergara.

Para el Auditor General de la Armada, la característica esencial del Oficial de Justicia es que debe ser un abogado, entendiendo por tal, una persona que tenga conocimientos generales y específicos en materia jurídica: “debe estar conectado con el mundo jurídico externo a la Marina, a los Tribunales de Justicia y a las instituciones del Estado para que, con ese dominio del tema, pueda prestar una asesoría eficiente al Mando”.

Del mismo modo, la Capitán de Corbeta JT María Carolina Riesco, Sub Jefe del Departamento Jurídico de la Dirección General del Territorio Marítimo y de Marina Mercante, y Auditor de la Dirección de Seguridad y Operaciones Marítimas, cree que el sello es que “tanto los abogados como el personal perteneciente a nuestra especialidad han demostrado tener un elevado nivel de preparación profesional”. Sin embargo, agrega que lo que caracteriza a sus integrantes es el cariño y respeto hacia la Institución que registra cada una de sus actuaciones.

Asimismo, la Capitán Vergara destaca que el sello de los Oficiales de Justicia es tener una visión más allá del profesional abogado, esto es, brindar una asesoría acorde a los requerimientos de la Institución, adecuarse a sus parámetros, sus códigos y otras aristas que afuera no se consideran.

ASESORÍA MARÍTIMA

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Capitán de Corbeta JT María Carolina Riesco.

Considerando que el 94% de nuestro comercio exterior se moviliza por mar y que existe un interés cada vez mayor por nuestro borde costero, la asesoría marítima toma un papel preponderante.

El Comandante Ramírez explica que “en este escenario, corresponde a la Autoridad Marítima fomentar el desarrollo seguro y respetuoso del Medio Ambiente en todas las actividades, a través de la prestación de servicios y la adecuada fiscalización, debiendo la Asesoría Jurídica colocar su grano de arena para que estas actuaciones sean eficientes y carentes de controversia”.

Además, junto a la Capitán Riesco, destacan la labor que han realizado como consecuencia del fallo dictado por la Corte Internacional de Justicia de La Haya: “en  relación al diferendo marítimo, la Autoridad Marítima ha evaluado qué normativa debe mantenerse o ser modificada a raíz del nuevo escenario, dirigiendo su parecer a los correspondientes estamentos políticos, por intermedio de la Comandancia en Jefe de la Armada”.

Por último, el Auditor General de la Armada llama a todos los auditores a que cumplan sus funciones de asesoría jurídica en forma leal y honesta, haciendo ver todos los aspectos favorables y desfavorables de una resolución, para que el Mando pueda, con un conocimiento acabado, tomar la mejor decisión para cada caso.