La nación de Nueva Centralia está bajo ataque, un grupo de violentos terroristas al acecho amenazan al comercio mundial y solucionar esta situación depende de las Fuerzas Multinacionales Sur (MNFS), que cuentan con el patrocinio de Naciones Unidas.

Este fue el escenario del ejercicio PANAMAX de este año, un evento multinacional que bajo el lema “Juntos podemos”, reunió a fuerzas militares de seguridad de toda la región para que pusieran en práctica sus capacidades para proteger los alrededores del Canal de Panamá.

Originalmente propuesto por Chile, el primer ejercicio PANAMAX se llevó a cabo en 2003. Finalmente, su realización tuvo lugar gracias a los esfuerzos coordinados entre Chile, Panamá y Estados Unidos. Desde entonces, este ejercicio militar creció significativamente en el transcurso de los años, con la participación y recursos de varios países.

Más de 320 efectivos militares participaron en las maniobras PANAMAX 2014, en un ejercicio dirigido a desarrollar una relación de trabajo más estrecha entre las fuerzas  multinacionales para asegurar la defensa del Canal de Panamá.

La fuerza multinacional 2014 incluyó a personal militar y miembros del Estado Mayor integrado de Brasil, Belice, Chile, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, El Salvador, Francia, Guatemala, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú y Estados Unidos, además de la cooperación de Naciones Unidas y de la Conferencia de Ejércitos Centroamericanos.

Este año, el ejercicio se dividió en tres grandes áreas estratégicas, la primera en Mayport, Florida, donde Chile participó como Comandante del Grupo Combinado de Fuerzas Especiales y además, formó parte de la Componente Naval de la Fuerza Multinacional que se encontraba al mando de la Armada de Colombia.

“Este ejercicio permite a las naciones estrechar la amistad y unirse como fuerza multinacional mientras combaten amenazas comunes”, dijo el contralmirante colombiano Benjamín Calle, Comandante del Componente Marítimo de las Fuerzas Combinadas. “El entrenamiento garantizará que la seguridad regional y la estabilidad trabajen a favor de la prosperidad de nuestras naciones”, agregó.

En San Antonio, Texas, se encontraba el segundo grupo, donde se constituyó la Fuerza Multinacional que controlaba las distintas componentes del Ejercicio. Esta estuvo a cargo del Ejército de Estados Unidos. En la MNFS, la Armada participó en los puestos de Deputy Commander Operations, que fue cubierto por el Contraalmirante IM David Hardy, además de integrar los grupos de logística, ciberdefensa y asuntos públicos

“Es bueno conocer otras culturas, personas, y hacer amistades y estrechar lazos de confianza entre los países de la región”, comentó el Contraalmirante Hardy.

Finalmente, el tercer grupo, se desplegó en Camp Pendlenton, California, donde se formó parte del Estado Mayor de la Unidad Expedicionaria de los Marines. El contraalmirante John Matheson, vicecomandante de la Cuarta Flota de de las Fuerzas Navales del Comando Sur de Estados Unidos actuó como vicecomandante del ejercicio  PANAMAX 2014.

Chile es uno de los principales usuarios del Canal de Panamá, por lo que su participación en la defensa de éste, es de vital importancia para el desarrollo económico de nuestro país y además le permite interoperar con Marinas de otras naciones, siendo un actor relevante y posicionando a nuestra Institución a nivel internacional.

El principal propósito de PANAMAX es asegurar que las naciones amigas estén mejor preparadas para trabajar en conjunto si el Gobierno de Panamá solicitara ayuda para proteger el tránsito comercial a través del canal - la vía navegable de 82 kilómetros de longitud que conecta los océanos Atlántico y Pacífico - y asegurar su neutralidad.

El Canal de Panamá es considerado como una de las infraestructuras de mayor  importancia estratégica y económica del mundo. El 6% del comercio internacional atraviesa el Canal de Panamá todos los años, el cual asciende a unas 400 millones de toneladas de productos. Además de ser sumamente importante para el movimiento libre del comercio internacional, la estabilidad económica de la región depende ampliamente del transporte seguro de varios millones de toneladas de carga que atraviesan el canal todos los años.